Los procesos de comunicación forman parte de un aspecto fundamental en toda compañía, pues a través de ellos se establece vínculo con los clientes y se proyecta una imagen de marca. Así entonces, se debe tener especial cuidado en este punto, pues si lo que queremos es retener clientes, debemos asegurarnos de cumplir con todo lo que prometemos, generar una buena imagen y llevar a cabo una comunicación efectiva.
A continuación, te mencionamos 6 maneras en que la comunicación con los clientes afecta a los resultados de tu empresa:
1. Entregar expectativas demasiado altas
A nadie le gusta sentirse estafado o engañado. Por ello, al comunicar jamás se deben agregar características o atributos a un producto que no los posee. Esto perjudica y daña las relaciones comerciales, genera clientes insatisfechos, quejas e incluso denuncias ante el Servicio Nacional del Consumidor (SERNAC). De este modo se puede acabar con la reputación de la empresa y se genera una muy mala imagen ante los consumidores.
2. Desviar plazos determinados
Siempre que se promete algo al cliente, se debe cumplir. Así, más allá de que nuestros productos cumplan con lo que se ofrece, debemos considerar todo aquello que conlleva una buena experiencia de cliente. En aspectos como el e-mail, el no contestar los correos enviados por clientes a tiempo ha demostrado ser una de las principales causas de insatisfacción frente a proveedores de productos y servicios. Así también, las garantías de los productos se deben cumplir y jamás se debe evadir solucionar desperfectos durante el tiempo estipulado.
3. Compararse con la competencia
Una compañía siempre debe posicionarse como líder por sus propios méritos. Ante esto, tratar de posicionarse hablando mal de otras compañías o siquiera establecer comparaciones, genera poca credibilidad y refleja poca experiencia, pues nuestros productos y/o servicios deben venderse por sus propias características, es decir, se deben valer por su funcionalidad y calidad.
4. Bombardear con información
Los procesos de comunicación con el cliente deben ser siempre efectivos, por lo cual el mensaje que proyecta la compañía siempre debe ser claro y conciso. Ante esto, jamás se debe “aturdir” al cliente con información, pues finalmente no entenderá nada de lo que le queremos decir y, lejos de lograr atraerlo, estaremos propiciando que se aleje de nuestra marca.
5. Entregar información confusa
Muchas veces tenemos demasiadas ideas y no logramos hilarlas entre sí. Por ello, es esencial siempre contar con un concepto claro que direccione nuestro mensaje. Esto da fuerza a una compañía y a la visión que los clientes tienen acerca de una marca. Siempre se debe tener claro qué es lo que se quiere comunicar y se debe seguir esa misma línea en todos los canales de comunicación. De este modo estaremos proyectando una imagen clara, profesional y estaremos entregando un concepto.
6. Descuidar el lenguaje
Mantener un buen nivel ortografía y redacción de documentos o correos en donde nos comunicamos con los clientes tiene especial relevancia, pues si queremos proyectar una imagen seria y profesional, tenemos que comunicarnos del mismo modo con nuestros clientes, incluso dentro de contextos informales. Un error en este ámbito nos hace perder credibilidad y proyecta una mala imagen de la compañía.
Si queremos retener clientes, no solo es necesario que vendamos productos de calidad, sino que también debemos proyectar una imagen de ellos que hable por sí sola. Así también, debemos crear procesos de comunicación efectivos con los clientes, a través de los cuales nuestra marca y productos se posicionen exitosamente.